domingo, 31 de diciembre de 2017

Jesús, María y José: la Sagrada Familia de Nazaret – por P. Fernando Gioia, EP

En el primer domingo del tiempo de Navidad, la liturgia nos presenta la fiesta de la Sagrada Familia de Nazaret, "escuela dónde comienza a entenderse la vida de Jesús, donde se inicia el conocimiento del Evangelio", en el decir del Beato Pablo VI (5-1-1964); "ícono de la iglesia doméstica", en palabras de Benedicto XVI (28-12-2011).
En lo oculto, en el silencio, en esa pequeña y desconocida ciudad Nazaret de la Galilea, encontramos estos grandiosos personajes que conforman la Sagrada Familia: Jesús, María y José. En la casa de Nazaret, cuyo significado, de nasar, sería "florecer o vigilar", es de dónde surgen lecciones que serán apropiadas para las familias de los días de hoy.

sábado, 30 de diciembre de 2017

[INCLUYE VIDEO] SON ORDENADOS TRECE NUEVOS SACERDOTES HERALDOS DEL EVANGELIO

VER VIDEO DE LA CEREMONIA DE ORDENACION
Bajo el manto protector de una imagen de tamaño natural de Nuestra Señora del Buen Suceso, el viernes 29 de diciembre fueron ordenados 13 nuevos sacerdotes Heraldos del Evangelio, en la Basílica Menor Nuestra Señora del Rosario, localizada en el Municipio de Caieiras al norte de la ciudad de Sao Paulo, Brasil.
Nuestra Señora del Buen Suceso

viernes, 29 de diciembre de 2017

LOS SANTOS URUGUAYITOS INOCENTES por Monseñor Jaime Fuentes (obispo de Minas, Uruguay)

Hoy es 28 de diciembre y, en estos días de Navidad, nos encontramos frente a un suceso misterioso y doloroso, del que habla solamente el evangelio de san Mateo: “Al verse burlado por los magos, Herodes montó en cólera y mandó matar a todos los niños de dos años para abajo, en Belén y sus alrededores, calculando el tiempo por lo que había averiguado de los magos” (Mt 2, 13ss).

jueves, 28 de diciembre de 2017

Comentario al Evangelio del Domingo 31 de diciembre (Fiesta de la Sagrada Familia) por Monseñor Joao S. Clá Dias, EP

La santidad, la nobleza y la jerarquía en la Sagrada Familia
[…] Amor desinteresado a la Jerarquía
En la Sagrada Familia, el ejemplo de San José, de Nuestra Señora y de Nuestro Señor Jesucristo nos lleva a comprender mejor la jerarquía en su forma más pura, más clara, más perfecta, en la que no hay egoísmo ni pretensiones.
En esta Familia existe puro amor de Dios. En ella existe el puro amor de Dios que genera amor a las múltiples jerarquías sin preocupación de ser demasiado, de hacer o poder mucho. La jerarquía aquí es amada. Y es amada por amor de Dios.
Las almas que tienen el verdadero sentido de la jerarquía aman de este modo a sus superiores.
La palabra “majestad”, tiene para ellos un significado, un misterio, una “luz”, un brillo especial que hace respetables y venerables a los reyes, emperadores y superiores en general, incluso cuando éstos, por sus defectos personales, no merecen los homenajes que les son prestados por ser lo que son.
Pero si, para aquello a lo que fueron llamados corresponden en algo, ese algo - por pequeño que sea - es como el aroma de una flor única de la cual se toma una gota, cuyo perfume produce sobre el hombre recto un efecto semejante al que la santidad mayor produce sobre la santidad menor.
Y esto tiene cierta analogía con lo que ocurría en la Sagrada Familia, entre las tres personas indescriptiblemente sublimes – una de ellas divina – que la componían.
He aquí algunas reflexiones sobre lo maravilloso y admirable que las verdaderas jerarquías – como aquella que existió, en un grado arquetípico, en la Sagrada Familia - pueden y deben suscitar en las almas rectas y auténticamente católicas.
Una vida de apariencia normal
No se piense que en la Sagrada Familia todo era absolutamente místico, sobrenatural y lleno de consolación.
Del Niño Jesús no puede decirse que vivía de fe, porque su alma estaba en la visión beatífica; sin embargo, quiso que su cuerpo tuviera el desarrollo normal de un ser humano. Así, por ejemplo, no nació hablando, aunque pudiera hacerlo en todas las lenguas del mundo.
La Virgen y San José llevaban también una vida de apariencia completamente común y, como todos los hombres, sufrieron desconciertos y angustias. Prueba de ello es el Evangelio de este domingo: “Tu padre y yo, angustiados, te andábamos buscando".
Monseñor Joao Clá Dias, EP
(MONS. JOAO SCOGNAMIGLIO CLA DIAS, EP in “Lo inédito sobre los Evangelios” Tomo I, Librería Editrice Vaticana)
Texto completo: La santidad, la nobleza y la jerarquía en la Sagrada Familia

[INCLUYE VIDEO] ORDENAN EN BRASIL NUEVOS DIÁCONOS HERALDOS DEL EVANGELIO

El miércoles 27 de diciembre fueron ordenados 13 nuevos diáconos Heraldos del Evangelio, en la Basílica Nuestra Señora del Rosario de Fátima, localizada en el Municipio de Caieiras al norte de la ciudad de Sao Paulo, Brasil
El obispo encargado en impartirles el orden diaconal fue Monseñor Benedito Beni dos Santos, obispo emérito de la Diócesis de Lorena (Estado de S. Paulo).
Los nuevos diáconos provienen de varios países latinoamericanos que estudian y se forman en el Seminario de la Sociedad Clerical Virgo Flos Carmeli que se encuentra junto a la Basílica.

lunes, 25 de diciembre de 2017

Sembradores de la belleza del Evangelio por Padre Alex Barbosa de Brito, EP

Para comunicar a los oyentes el resplandor de la Buena Nueva, el predicador debe reflejarla en su propia vida. Juan Pablo II, Benedicto XVI y Francisco han estimulado a los pastores a que adornen sus

sábado, 23 de diciembre de 2017

Volvámonos hacia el Niño Jesús… por Plinio Corrêa de Oliveira

Nos encontramos en una situación dominada completamente por el caos. No hay un solo aspecto de la vida política internacional contemporánea en la cual no se note la confusión.
No es un momento para estar rememorando junto a la cuna del Niño Jesús tantas actitudes mal hechas, mal pensadas, mal planeadas, porque no las presidió el Espíritu de Nuestro Señor Jesucristo.
El secreto de la adecuada organización de todas las cosas en la vida terrena, se encuentra en la canción que los ángeles entonaron en la noche de Navidad para los pastores maravillados: “Gloria a Dios en lo más alto de los Cielos y paz en la Tierra a los hombres de buena voluntad.”
Cuando todos los hombres reconocen la majestad, la omnipotencia, la santidad, en fin, el culmen de todas las perfecciones que hay en Dios en lo más alto de los Cielos, y por eso lo glorifican, nacen entonces en el corazón de los hombres las buenas disposiciones de espíritu por las cuales se vuelven hombres de buena voluntad.
Si nos acordamos de que esa noche de Navidad es una noche de misericordia y de bondad, de perdón y de esperanza, que próxima a la cuna del Niño Jesús está Nuestra Señora – cuya oración junto a su Divino Hijo es omnipotente – y que Ella tiene un corazón de Madre que ama a cada uno de los hombres más de lo que todas las madres del mundo amarían a su hijo único, y que, por lo tanto, Ella está dispuesta a obtenernos del Divino Infante el perdón de nuestras faltas, la enmienda de nuestros errores y defectos, y el propósito firme de seguir en todo la Ley de Dios, si tomamos eso en consideración, comprenderemos que, por más fuerte que sea el mal, todas las puertas de la esperanza están abiertas para nosotros, desde que nos volvamos hacia el Niño Jesús nacido en Belén.
Quiero atraer la atención de todos hacia esa esperanza consoladora.
Deseo que, cuando las campanas toquen la media noche anunciando que la Navidad llegó, las personas se estén dirigiendo tranquilamente a asistir al Santo Sacrificio de la Misa, y las familias vayan en grupos a rezar a los pies del Santo Pesebre, todos recuerden esa gran esperanza y, dejando de lado las aflicciones de la hora presente, comprendan lo que dice el Apóstol: “Jesucristo es el mismo ayer, hoy y siempre.” (Heb 13, 8). 1
1) Fragmentos del mensaje de Navidad grabado por el Dr. Plinio Corrêa de Oliveira el 18.11.1992.
(Editorial de la Revista Dr. Plinio, No. 225, diciembre de 2015, p. 4, Editora Retornarei Ltda., São Paulo).

sábado, 16 de diciembre de 2017

Comentario al Evangelio del Domingo 3º de Adviento (domingo 17 de diciembre) - Ciclo B - por Mons. João S. Clá Dias, EP

[...] III - ¡No nos dejemos engañar por la aparente alegría del pecado!
San Juan Bautista

De modo bien diferente a la incondicional alegría que la venida del Redentor debería traer, he aquí la correlación entre júbilo y tristeza, euforia y probación, evocada por el Evangelio de este 3º Domingo de Adviento. Mientras los

viernes, 15 de diciembre de 2017

Monseñor Pablo Galimberti (Obispo de Salto) cuestiona votación de Uruguay en Asamblea General de la ONU


¿Cobran al grito?

por Mons. Pablo Galimberti Hay fundadas
sospechas. La pregunta surge al conocer cómo votó nuestro país en la reciente Asamblea General de la ONU realizada en Nueva York.
Se quería relativizar el derecho de los padres con respecto a la educación de sus hijos, en particular lo referido a lo afectivo y sexual.

jueves, 14 de diciembre de 2017

El obispo de Minas considera inaceptables ciertos contenidos de Ley sobre violencia contra las mujeres.

Monseñor Jaime Fuentes, obispo de la diócesis de Minas  manifestó su gran preocupación ante la aprobación en la Cámara de Diputados, del proyecto de ley que llevó dos años corregirlo y aprobarlo en el Senado, sobre la violencia contra las mujeres, por considerar inaceptables algunos de sus contenidos.
Advierte Monseñor Fuentes: “Al leer con atención el Artículo 21 de dicho proyecto, no puedo sino sentirme muy preocupado ante el siguiente acápite: Violencia simbólica; esa ejercida a través de mensajes, valores, símbolos, íconos, imágenes, signos, e imposiciones sociales, económicas, políticas, cuturales y de creencias religiosas que transmiten, reproducen y consolidan  relaciones de dominación exclusión, desigualdad y discriminación que contribuyen a naturalizar la subordinación de las mujeres”.
El obispo concluyó: “Al leer esto, uno dice es inaceptable, ¡repito es inaceptable! No es sino la manida Ideología de Género metida bajo el paraguas de un proyecto de ley contra la violencia hacia las mujeres, que me parece excelente.  Ahora, so pretexto de estos conceptos cualquiera puede ser acusado de cualquier cosa. ¿Dónde estamos?”

lunes, 11 de diciembre de 2017

¿Por qué la Navidad se conmemora el 25 de diciembre?

Natalis solis invicti: con este nombre, el Emperador de Roma, Aureliano (270-5) oficializaba la tradicional conmemoración del sol naciente e invencible.
Todos los años, el día 25 de Diciembre, sucedía algo muy curioso... Debido a la inclinación natural del planeta, en el hemisferio norte transcurría el día más corto y, consecuentemente, la noche más prolongada del año.
El paganismo de los romanos atribuía a ese hecho el significado de ser una amenaza de los dioses, pues notaban, a lo largo de las estaciones, la progresiva disminución de las horas solares, hasta llegar al clímax que se daba en esa ocasión. Asustados, les ofrecían desagravios y, por medio de prolongados rituales y celebraciones, juzgaban atraer el beneplácito de los dioses, evitando así el desaparecimiento de la luz.
Con el advenimiento del Cristianismo, los romanos recién convertidos guardaban nostalgias de las fiestas realizadas por ocasión del Natalis Solis Invicti. Por esta razón, la Santa Iglesia encontró un sapiencial medio de direccionar para el bien esa arraigada tradición: conmemorar, en ese mismo día, el nacimiento del "Sol de la Justicia que trae la salvación en sus rayos" (Ml 3, 20). Y apoyada en pasajes de la Sagrada Escritura, en los cuales el Mesías es presentado como la "Luz para iluminar las naciones" (Lc 2, 32) (cf. Jo 1, 9), emprendió la cristianización de esa vieja costumbre pagana.
Sobre relieve de Solis Invicto
Un antiquísimo mosaico del siglo III, encontrado en la cripta vaticana y conocido como el Mausoleo de los Iulii, conjuga grandiosamente las imágenes de Cristo y del Sol, sobre un carruaje triunfante. Con base en esto, se atribuye al Emperador Constantino, constructor de la Basílica Vaticana, ser uno de los primeros a instituir, en esa fecha, la celebración de la Navidad.
El primer calendario a constatar ese hecho fue editado por un personaje conocido como Filocalos (354). Con todo, la declaración oficial de la Santa Iglesia fue proferida por el Papa Julio I (337-352).
Por Sebastián Correa Velásquez
Fuente: www.gaudiumpress.org

domingo, 10 de diciembre de 2017

Comentario al Evangelio del Domingo II de Adviento – Ciclo B (domingo 10 de diciembre) por Monseñor João S. Clá Dias, EP

[...] III – Una entrega que prepara el alma para la Navidad
El tiempo litúrgico del Adviento nos lleva a participar, de cierta forma, de los anhelos  de todos aquellos que en el Antiguo Testamento aguardaron con fidelidad la venida del Mesías, y a vivir el clima de grandiosa expectativa alentado por el Precursor.
La necesidad de “conversión incesante”
Transcurrieron dos mil años de ese acontecimiento histórico [el nacimiento de Jesús], todavía para Dios no hay ayer ni mañana, y sí apenas un eterno “hoy”. Como de los israelitas cautivos en Babilonia, o de los judíos de la época de Jesús, Él espera de nosotros la conversión.

sábado, 9 de diciembre de 2017

Diócesis de Minas celebra a su patrona, la Inmaculada Concepción de la Santísima Virgen

El viernes 8 de diciembre la diócesis de Minas, encabezada por su obispo Monseñor Jaime Fuentes, celebró la fiesta de la Inmaculada Concepción, su patrona.
Entre las actividades se incluyó  la tradicional procesión –que se realiza interruptamente desde 1783-  por las calles del centro de la ciudad de Minas, con la imagen de la Virgen de la Inmaculada Concepción.

domingo, 3 de diciembre de 2017

Comentario al Evangelio del Domingo 1º de Adviento Ciclo B (domingo 3 de diciembre) por Monseñor João S. Clá Dias, EP

[...] III-Conclusión
En nuestro egoísmo, somos llevados a considerarnos el centro de nuestras atenciones y preocupaciones; sin embargo la esencia de nuestra vida cristiana, es social: “Amaos los unos a los otros (Juan 13, 34; 15, 12, 17); o “aquel que ama su prójimo cumplió toda la Ley” (Rm 13, 8). Jesús pesa nuestros actos en función de nuestra misericordia con el prójimo, o sea, Él usa para juzgarnos un criterio social.

viernes, 1 de diciembre de 2017

La familia… ¡recemos por la familia! por el Padre Fernando Gioia, EP

La familia - uno los bienes más preciosos de la humanidad- como dijo San Juan Pablo II: "en los tiempos modernos, ha sufrido quizá como ninguna otra institución, la acometida de las transformaciones amplias, profundas y rápidas de la sociedad y de la cultura" (Familiaris Consortio, 1). Preocupantes son los signos de degradación de