Gaudium Press, Lunes, 30-04-2018.- Transcurridos 100 años de
las apariciones de Nuestra Señora en Fátima, muchos esperaban alguna
manifestación sobrenatural de la Madre de Dios que confirmase las anteriores
advertencias hechas en 1917 a los tres pastorcitos, Lucía, San Francisco y
Santa Jacinta.
No habiendo el mundo dado oídos a los pedidos hechos entonces, era de esperar algo que sacudiese la conciencia de esta humanidad pecadora y adormecida, que ningún aviso del Cielo parece ser capaz de despertar.
Y, si los hombres no se importan con las advertencias venidas de lo Alto, también Dios parece haber vuelto las espaldas a este mundo, dejando que los acontecimientos corran por sí, arrastrando la civilización contemporánea hacia un futuro incierto y poco auspicioso,
No habiendo el mundo dado oídos a los pedidos hechos entonces, era de esperar algo que sacudiese la conciencia de esta humanidad pecadora y adormecida, que ningún aviso del Cielo parece ser capaz de despertar.
Y, si los hombres no se importan con las advertencias venidas de lo Alto, también Dios parece haber vuelto las espaldas a este mundo, dejando que los acontecimientos corran por sí, arrastrando la civilización contemporánea hacia un futuro incierto y poco auspicioso,