lunes, 12 de noviembre de 2018

Injusto ultimátum recibe congregación femenina del sur de Francia por parte de las autoridades eclesiásticas

Ante esta grave y triste situación 34 de las 39 religiosas han solicitado la disolución de  sus votos
Se trata del Instituto las Hermanitas de María, Madre del Redentor, fundadas en 1949, en el sur de Francia, que cuidan de los ancianos, colaboran en el cuidado pastoral de las parroquias, ayudan a los pobres y viven una espiritualidad que hoy es considerada "clásica" por el Vaticano: amor por la adoración a la Eucaristía, ferviente oración y devoción filial a la Santísima Virgen. Administran cuatro residencias de ancianos en la diócesis de Laval y Toulouse (Francia).
Inexplicablemente, las hermanas fueron investigadas en 2009 por decisión del obispo diocesano de Laval, que los laicos que apoyan a las religiosas, acusan de tener algún interés en la administración de sus bienes. Una de las interventoras designada por la autoridad eclesiástica,  la hermana Geneviève Médeviellem, enseña en el Instituto Católico de París y afirma que la fornicación es justificable...
Pero la iniciativa no tuvo éxito.
En 2016, fueron visitadas por el cardenal Braz de Aziz, prefecto de la Congregación para los Religiosos; esta vez no por razones administrativas sino por la seria sospecha de “tradicionalismo” o clasicismo, como dicen los franceses. Las monjas fueron acusadas de graves “delitos” tales como la excesiva oración…
Las superioras, exiliadas en otros conventos, fueron acusadas ​​de "autoritarismo desviado", y se ordenó a las monjas que obedecieran sin apelar "sin - dicen - la menor objeción de conciencia".
Las monjas rechazaron las acusaciones por falsas e inventadas por los visitadores. Los comisionados y la Congregación les dieron razón, al menos en parte, pero mantuvieron las medidas tomadas; es decir, confirmar la intervención. Pero las hermanas decidieron no aceptar lo que, y no solo para ellas, parece una injusticia evidente.
Ante esto hicieron pública su decisión:
"El 17 de septiembre de 2018, el Cardenal Prefecto de la Congregación para los Religiosos, Mons. Braz de Aviz, nos escribió un ultimátum: si no aceptamos al Comisionado "sin reservas ", podríamos ser separadas del instituto.
Sobre 34 de las 39 religiosas:
- Después de proponer muchas veces soluciones de apaciguamiento, sin recibir ninguna respuesta,- Previa consulta con personas autorizadas y competentes,
- Después de rezar mucho y siempre preocupadas, de seguir siendo hijas de la Iglesia, queriendo permanecer fieles y obedientes a la verdad. Nos pareció que no teníamos más remedio que renunciar a nuestros votos.
Por lo tanto, somos 34 de las 39 hermanas, pertenecientes al Instituto de las Hermanitas de María que hemos solicitado al Dicasterio para los religiosos, seamos dispensadas de nuestros votos. No hacemos este sacrificio a la ligera: deseamos permanecer en plena comunión con la Iglesia, pero no podemos demostrar más claramente, ni más dolorosamente, nuestra imposibilidad, en conciencia, de obedecer lo que se nos impone".
En este período se estableció en la ciudad de Laval, un Comité de apoyo a las religiosas, encabezado por su alcalde Serge Launoy, que cuenta con casi tres mil personas y que se puede visitar en el sitio https://www.soutienpsm.com
Todo esto se da en un país donde la situación de las vocaciones es, por decir lo menos, desastrosa, y donde el tema de los abusos clericales está surgiendo paulatinamente con toda gravedad, llegando a involucrar a un cardenal y al Prefecto de la Congregación para la Doctrina de la fe.
Según consigna Maurizio Blondet en su blog, este tipo de situaciones de hostigamiento a institutos religiosos por parte de las autoridades religiosas, se vienen verificando en distintos países, y las cuales son poco conocidas por el gran público.
Con información de: ¡Las Hermanitas se enfrentan a graves dificultades!