Minas (Miércoles,
07-11-2018, Gaudium Press) Mons. Jaime Fuentes, obispo de Minas en Uruguay, es
directo, propone volver a lo fundamental: "De todos los días: homicidios,
femicidios, asaltos, rapiñas, copamientos, robos, fraudes, golpes, suicidios...
e ainda mais. Uno se pregunta: ¿no será hora de empezar a enseñar en las
escuelas los 10 Mandamientos que Dios dio para vivir en paz?", escribió el
prelado en su cuenta de Twitter.
Sin educación, la
represión se muestra insuficiente: "Pertenece a la tradición más elemental
que tienen las personas. A mi forma de ver, con medidas represivas, haciendo
más cárceles, ya se vio que no se va a ninguna parte sino que todos los días
aumenta el grado de violencia", expresó.
Los 10 mandamientos
han sido regla básica del relacionamiento humano, es "una base esencial de
la convivencia respetar a una ley que está más allá de los partidos políticos o
el gobierno de turno".
¿Violación
de la laicidad?
Mons. Fuentes dijo
que hay una aplicación errónea del principio de la laicidad.
"Se entiende
como la prohibición de hablar de Dios en los centros educativos y ese me parece
un atentado a la sabiduría. Es un gran atraso ignorar que hay unas reglas de
funcionamiento del ser humano que fueron dadas hace muchos siglos y que tienen
validez perenne", expresó.
La laicidad verdadera
es un respeto por el hecho religioso diverso. "Pero seguimos empeñados en
que la laicidad se trata de una prohibición de hablar de Dios. Eso no puede
ser".
Predicar
los mandamientos es una necesidad imperativa ante la gravedad de la situación
actual
El alejamiento de la
sociedad de los 10 mandamientos, tiene consecuencias desastrosas: "El
cuarto mandamiento dice ‘honrar padre y madre' y resulta que la violencia
doméstica es un tema de terror. El quinto mandamiento dice ‘no matarás' y es
una barbaridad lo que sucede con los homicidios. Séptima mandamiento: ‘No
robarás' y hay corrupción en todos lados. Y el octavo mandamiento es ‘no
mentirás' y nadie lo cumple".
Es claro para el
prelado que el problema trasciende el Uruguay y abarca al mundo entero.
"¿Cuál es la base común que nos hermana a todos? Los diez mandamientos.
Bueno, volvamos a ellos con la necesidad de explicarlos a fondo",
puntualizó.